Tricomoniasis es una infección de transmisión sexual (ITS) curable causada por el protozoo Trichomonas vaginalis (TV).
En este artículo trataremos la fisiopatología y las características clínicas de una infección típica por Trichomonas vaginalis, las investigaciones actuales, los tratamientos y cómo puede afectar al embarazo.
Fisiopatología
Trichomonas vaginalis se transmite a través de relaciones sexuales vaginales sin protección - no se transmite a través del sexo oral o anal. Aunque es poco frecuente, también es posible que una madre infectada transmita verticalmente la enfermedad al neonato en el parto.
Trichomonas vaginalis es un protozoo anaerobio flagelado que puede afectar a la uretra femenina, la vagina y las glándulas parauretrales, así como a la uretra masculina y por debajo del prepucio. La infección uretral está presente en casi todos los casos y en las mujeres suele haber infección en más de un sitio.
La TV se replica por fisión binaria y destruye las células epiteliales por contacto celular directo y mediante la liberación de citotoxinas. También se une a las proteínas plasmáticas del huésped, impidiendo su reconocimiento por la vía del complemento. Se cree que esta destrucción también puede aumentar el riesgo de contraer el VIH.
Factores de riesgo
A continuación se enumeran los factores de riesgo asociados a la tricomoniasis, la mayoría de los cuales son comunes a otras ITS:
- Múltiples parejas sexuales
- Relaciones sexuales sin protección
- Antecedentes de otras ITS
- Las mujeres mayores corren más riesgo de TV
Características clínicas
Muchos casos de infección por TV son asintomáticos, especialmente en los hombres, que a menudo se presentan como pareja de una mujer infectada. Si son sintomáticos, los signos y síntomas suelen desarrollarse en los 28 días siguientes a la infección.
Mujer:
Síntomas:
- Olor vaginal desagradable
- Flujo vaginal anormal - espeso/delgado/espumoso y amarillo-verdoso.
- Picor o dolor en la vulva
- Dispareunia
- Disuria
Señales:
- Flujo vaginal anormal - espeso/delgado/espumoso y amarillo-verdoso.
- Vulvitis
- Vaginitis
- Cuello uterino en fresa - aspecto punteado y papiliforme
Hombre:
Síntomas:
- Secreción uretral
- Disuria
- Frecuencia urinaria
- Dolor o picor alrededor del prepucio
Señales:
- Secreción uretral
- Balanopostitis - inflamación del glande del pene (poco frecuente)
Investigaciones
Como ocurre con todas las ITS, es necesario realizar una anamnesis y una exploración minuciosas para determinar la probabilidad o gravedad de la infección. Si se sospecha infección por TV, se toman muestras para cultivarlas y establecer la sensibilidad o, si se está en un centro especializado, la microscopia in situ puede revelar TV.
- Mujer:
- Se toma un hisopo vaginal alto del fórnix posterior durante el examen o
- Hisopo vaginal autoadministrado
- Varones:
- Hisopo uretral o
- Muestra de orina de la primera micción
Si el paciente da positivo en la prueba de tricomoniasis, es necesario realizar un rastreo de contactos.
Es importante realizar un cribado completo de ITS para detectar infecciones coexistentes. También puede ser necesario realizar análisis de sangre si hay rasgos sistémicos de infección.
Gestión
La tricomoniasis puede tratarse con éxito con antibióticos antiprotozoarios. Orientación actual para hombres y mujeres no embarazadas ni lactantes:
- Metronidazol 2 g por vía oral en una dosis única o
- Metronidazol 400-500 mg dos veces al día durante 5-7 días
Alternativas a los regímenes recomendados:
- Tinidazol 2 g por vía oral en una sola dosis
La(s) pareja(s) actual(es) del paciente y cualquier pareja sexual de las cuatro semanas anteriores también deben someterse a la prueba y al tratamiento simultáneamente.
Debe aconsejarse a los pacientes que se abstengan de mantener relaciones sexuales durante el tratamiento o al menos una semana después de la dosis única. La prueba de curación no es necesaria a menos que el paciente no responda al tratamiento o se reinfecte.
Para más información, consulte el Directrices nacionales del Reino Unido sobre el tratamiento de Trichomonas vaginalis.
Trichomonas Vaginalis en el embarazo
En las mujeres embarazadas, la tricomoniasis puede conllevar un riesgo de parto prematuro y de que el bebé tenga bajo peso al nacer. La infección por TV en el parto también puede predisponer a la sepsis materna posparto. Las mujeres embarazadas reciben el mismo tratamiento que las no embarazadas, aunque no se recomiendan regímenes de dosis altas durante el embarazo. El metronidazol también puede afectar al sabor de la leche materna, por lo que no se aconsejan regímenes de dosis altas o, si se utiliza una dosis única, debe evitarse la lactancia durante 12-24 horas.